Un cálido homenaje y un gran aplauso para todos ellos…

Conmemorar el Día del Trabajador tiene un significado especial porque recuerda una jornada de lucha histórica de los trabajadores en busca de lograr condiciones de vida y de trabajo dignas. Rememora también las injusticias sociales y laborales que aún perduran.
La celebración de esta jornada, como Día internacional de la Clase Obrera, fue acordada en el Congreso de la Segunda Internacional, que se celebró en París en 1889, como homenaje a los Mártires de Chicago.
¿Por qué trabajamos? ¿Para qué trabajamos? ¿Cómo trabajamos?
Son preguntas que nos lleva a pensar en el sentido verdadero del y trabajo como actividad humana creativa y productiva.
En la esencia del ser humano convive la capacidad de pensar, querer y hacer. Nuestras facultades superiores: la inteligencia, la voluntad y nuestras emociones, son nuestros mejores aliados para vivir como personas dándole un sentido a nuestra vida.
Esto nos diferencia de las plantas y de los animales y nos define como personas.
Y así el trabajo, entendido como capacidad de poner toda nuestra inteligencia, voluntad, esfuerzo y compromiso al servicio de una tarea, es lo que realmente dignifica a la persona.
Trabajar nos permite ser protagonista no solamente espectadores, porque gracias a eso podemos transformar la realidad.
“EL TRABAJO DE TODOS SOSTIENE A LA HUMANIDAD, y nuestra carta magna, LA CONSTITUCIÓN NACIONAL, la vía para sostener nuestros derechos.”
EQUIPO MAP